Soliloquio en Re y Mi

En la caminata de hoy, resolví que el problema de la vida es, simplemente, un problema musical. Así como lo lee, un problema de tonos. Me explico:

He pasado diecinueve años viviendo en tono RE.
REsumiendo, REsbalando, REnaciendo.
REtomando, REspirando (este último es fundamental)
REinventándome, REviviendo, REnegando.
REgalando, y por supuesto, REcibiendo.
RElacionándome, REsignándome (acción en corcheas).
REmodelándome, REcuperándome, REstaurándome.

¡Podría nombrar tantos tonos RE, mi querido amigo! Que REsultaría hasta REdundante.


¿Qué hacer para solucionar el problema sin destruir la melodía creada?

Creo que es mucho más sensato y beneficioso, elevar el tono a MI.

Tal como usted lo lee...

No sé si, en ese caso, todo sería más simple... Pero podría ser más provechoso.

Sugiero vivir por MI, para MI y desde MI.

(24-06-2005)